La meditación y el cuerpo
La meditación se conoce como la práctica de no ser, consiste en esencialmente relajar el cuerpo y la mente, para que podamos transformarnos en observadores de nuestra naturaleza.
El principio de esta práctica comienza con el cuerpo, con nuestra postura.
A continuación explicamos algunos conceptos básicos sobre la parte física de la meditación
Postura inicial
Lo más común para todos los que se inician en la meditación, es sentarse en el suelo con las piernas cruzadas. Lo que genera una sensación de equilibrio al crear un centro de gravedad bajo y creando una confortable sensación de equilibrio.
Ha de mantenerse erguida la cabeza, hombros relajados, la espalda y el cuello rectos, de forma relajada, lo que permitirá una respiración profunda.
Los brazos de dejarán caer sobre los muslos y las manos deberán colocarse en forma de copa en el regazo.
Esta sería una postura ideal para iniciarse, con la práctica y tiempo se logrará compaginar el control del cuerpo y la mente sin esfuerzo
Equilibrio y Estabilidad
La mejor imagen que representa la meditación está reflejada por el Buda meditando. Suele representarse sólo sentado en el suelo. Evocando el equilibrio y la estabilidad.
El objetivo de la meditación es enraizarnos en el mundo físico para poder avanzar más profundamente dentro de nosotros mismos.
Por esto es de gran importancia encontrar una posición que ayude a la correcta realización de nuestra práctica, y una de las mejores maneras de comenzar es la de sentados en el suelo, que representa la figura meditadora por excelencia y que se puede observar en la gran mayoría de tradiciones espirituales.
Ayudas de soporte para la meditación
En la actualidad existe gran cantidad de elementos que nos pueden ayudar mejorar la comodidad física o apoyo para la práctica de la meditación, entre los que encontramos como los más utilizados los Zafus , esterillas o sillas diseñadas especialmente para esta práctica.
EN este sentido si no se desea realizar un gasto adicional, siempre con una manta doblada o un cojín adecuado se puede conseguir eliminar cualquier malestar físico que nos pueda distraer de esta práctica.
Perfeccionando la Postura
Independiente mente si utilizamos los implementos anteriormente mencionados, la base principal de una correcta postura es que debe realizarse con una alineación correcta de cuello, espalda y hombros.
Se cree que esta postura es la que ayuda a canalizar o servir de canal entre la tierra y el cielo, al mantener la postura más erguida o recta, la conexión espiritual es mayor.
La explicación a esta creencia se basa en que, al estar las vértebras correctamente alineadas te permite soportar tiempos más largos para la meditación.
Posturas Avanzadas
Una gran parte del practicante de la meditación prefiere la postura de las piernas cruzadas debajo de ellos. Ya que les resulta más cómodo y les brinda un apoyo y una postura estable.
Sin embargo cuando se va adquiriendo más experiencia, son muchos los practicantes se esfuerzan por perfeccionar su postura, logrando la difícil posición del loto, que consiste en colocar los pies doblados con las platas hacia arriba sobre los muslos opuestos.
La posición de meditación de Loto es la más exigente y también la más difícil ya que se requiere de cierta elasticidad en las piernas. Esta posición es muy común su uso entre los practicantes más avanzados.
Lo más importante es que cuando practique la meditación, intente usar cada sesión para concentrarse en la unión de cuerpo y mente, intentando que la calma mental y la comodidad física estén al unísono.
NAMASTE